lunes, 28 de septiembre de 2015

Imposible quedar bien con todo el mundo.

No todos iniciamos el camino de la búsqueda de un destino, mucho menos si el instrumento es el paladar.
Por mi formación profesional, entiendo lo importante que es la dieta en el desarrollo individual. Soy agrónomo y mi profesión se basa en ajustar los requerimientos nutricionales de plantas y animales según sea el propósito.
Desde joven, me llamó la atención cuan parecido eran los controles de maternidad entre distintos tipos de mamíferos, pude experimentar varias gestaciones de personas muy queridas en el momento en que desarrollaba profesionalmente el manejo de rebaños de ganado.
Pues bien, ahora que han pasado los años y los excesos en la alimentación y estilo de vida han dejado una profunda huella en mi, decidí iniciar una búsqueda que me permitiera obtener lo mejor de la vida, pero a un justo precio en cuanto a la salud y bienestar.
Les aseguro que probé las recomendaciones nutricionales oficiales y particulares. Todo cuánto escuchaba, desde recetas de remedios caseros hasta verdaderos rituales. Algunos los toleré, otros definitivamente no eran mi estilo. Decidí buscar en la ciencia, cosa que se me da bien (el buscar) y conseguí teorías relacionadas con la genética humana, la importancia del grupo sanguíneo… llegué a un libro por casualidad luego a otras fuentes escritas por el Peter D´adamo y colaboradores “La Dieta del Genotipo”.
En éstas lecturas, hallé todo un marco teórico y recomendaciones, tan pronto leía se desplegaba todo cuanto sabía del funcionamiento de la biología, lo que me motivó a investigar en artículos científicos de investigaciones y tendencias novedosas, así como conexiones con páginas en internet y blogs de excelente contenido que han ampliado mi visión sobre el tema.
Los resultados en términos de bienestar han sido extraordinarios. En primer lugar he minimizado las huellas que los usos y los abusos habían dejado en mi frágil cuerpo, al tiempo que éste se ha fortalecido. En segundo lugar he encontrado un camino para volcar los conocimientos y experiencias que he desarrollado en mi profesión sobre el cuidado de especies animales y vegetales de interés comercial (soy formado en la agronomía y horticultura) en mi propio cuidado personal. Tercero, en función de esa fusión he desarrollado un método que mi círculo mas cercano de amigos y familiares han seguido con extraordinarios resultados y que gracias a su origen científico y metódico he podido verificar, corregir y mejorar. Cuarto, otras personas desconocidas han sido capaces de aplicar el método a sus propias realidades sociales y culturales y también alcanzaron éxito en términos de bienestar, control de peso y vitalidad.
Lo más impresionante es que quien adopta este método, acusa haber pasado de un estado de preocupación constante, incluso sentimiento de culpa sobre lo que comían a diario, a un estado de disfrute de la comida sin precedentes. El comer se ha convertido en un placer, bajo el entendido que cada bocado de los alimentos seleccionados contribuirá con el fortalecimiento, vigorosidad y mantenimiento de su cuerpo, al tiempo que han mejorado su silueta, su figura. Mucho valoran como yo, cierto “rejuvenecimiento” en el sentido que podemos retomar actividades físicas que hacíamos cuando jóvenes.

Bueno, no todo es perfecto, también hay una queja constante, todos, absolutamente todos los que han aplicado el método, se quejan de haber perdido la ropa, en el peor de los casos han tenido que comprar una talla menor, incluso hay casos de pérdida de hasta tres tallas en pantalones y camisas. ¿Qué cosa no? Es imposible quedar bien con todo el mundo.